024.- Elvis, así como es (Año 2021)

 

           Unimos en esta ocasión actualidad con el pasado. El domingo 3 de octubre de 2021 se proyectó en la SALA BORJA de nuestra ciudad el documental Elvis, that’s the way it is (Denis Sanders, EE. UU., 1970). No era un hecho aislado sino que se celebraba más o menos simultáneamente en varias ciudades el mismo fin de semana (Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante, entre otras) organizado por el Club Elvis en España, asociación sin ánimo de lucro

dedicada a divulgar y celebrar todo aquello que tenga que ver con el célebre rey del rock and roll. A pesar del tiempo transcurrido desde que el cantante falleció (16 de agosto de 1977), lo cierto es que sus fans no dejan de recordar su obra a lo largo de todo el planeta, y gente joven que descubre su legado renueva y mantiene el interés. La cantidad de material que genera a día de hoy es realmente increíble, mayor que muchos cantantes en activo. Este club, por ejemplo, dispone de varias delegaciones en diferentes ciudades, organiza eventos, edita una revista, realiza La Hora Elvis, un programa de radio que se emite todos los viernes desde 1996 en Barcelona. Incluso alguno de sus socios ofrece música y reportajes de ELVIS PRESLEY exclusivamente, las veinticuatro horas del día todos los días del año, en Elvis Radio 24 horas. Todo esto sólo en España.

            La pandemia del COVID hizo suspender todas las actividades que esta asociación tenía previstas, entre ellas esta proyección conjunta en todas las delegaciones del documental citado anteriormente, estrenado en los Estados Unidos cincuenta años antes, concretamente el 11 de noviembre de 1970. Una vez que se han ido relajando las condiciones de reuniones, proyecciones, etc., han retomado su idea, y ese fin de semana terminó realizándose.

             En Valladolid, la proyección tenía además el atractivo de poder disfrutar del documental en pantalla grande, en unas condiciones de imagen y sonido (se proyectó en blu-ray) realmente magníficas. Además, en una versión remontada y remasterizada en 2001.

            Mis primeros ídolos musicales fueron THE BEATLES y ELVIS PRESLEY, quizá porque lo primero que escuché que me gustara cuando tuve un radiocasete, fueron esos intérpretes. Con posterioridad se incorporaron otros grupos a mi catálogo musical, por supuesto, pero aquellos han seguido manteniéndose entre los destacados, decantándome más por los británicos ya que en el instituto varios amigos (e incluso, los profesores de inglés y sus audiciones) también optaban por el cuarteto de Liverpool. Por otro lado, la televisión emitía con cierta frecuencia películas de ELVIS, en las que, seamos objetivos, exceptuando un par de ellas, lo único salvable eran las canciones, si te gustaba el estilo, porque el argumento era básicamente siempre el mismo. De hecho, esa era la idea de aquellas películas, de las que el propio ELVIS acabó harto: la promoción de los discos.

            Sin embargo, seguí coleccionando discos de ELVIS. Todo esto por justificar que, sin ser un experto (de hecho tras conocer varias personas del Club Elvis, descubrí lo poco que sabía en realidad), su trayectoria musical no me es desconocida. Y aunque también he visto gran parte de los documentales sobre el cantante, tanto los estrenados en nuestro país, como otros inéditos por aquí, sin embargo, éste concretamente no lo conocía.

           A la entrada, había dispuestas unas imágenes de ELVIS a tamaño adecuado para hacerse unas fotos de recuerdo. Entrando en el patio de butacas, otra imagen del cantante ocupaba la pantalla, presidiendo el escenario un póster original de los años setenta del estreno de la película en España, una réplica de una guitarra utilizada por ELVIS en la película y una foto de fans de la delegación vallisoletana con algunos miembros de la TCB Band y sus firmas (el grupo de músicos que acompañó a ELVIS PRESLEY desde agosto de 1969 hasta su fallecimiento en 1977), todo fantásticamente organizado por BLANCA y ÁNGEL, la pareja que preside la delegación vallisoletana, que no deja de organizar eventos en torno a ELVIS. 

Antes de empezar la proyección, se hizo una breve introducción enmarcando el documental que íbamos a ver. Terminado el periodo cinematográfico de ELVIS, y sin haber dado un concierto en directo desde 1961, planeaban muchas dudas sobre si “el rey” mantendría la voz, el tipo y la fuerza necesarias para afrontar el esfuerzo de las actuaciones en directo. Como primera aproximación, grabó un programa especial para la NBC, el célebre ’68 Comeback Special, emitido por primera vez el 3 de diciembre (sería repuesto dos veces más, en 1969 y 1984) que se convirtió en uno de los musicales más célebres de la historia de la televisión, en el que hubo innovaciones que posteriormente han imitado otros artistas. Sin embargo, la duda persistía: una cosa es el directo, y otra las grabaciones que luego se arreglan.

            Paralelamente, los espectáculos en Las Vegas llevaban languideciendo bastante tiempo. Salvo los adictos jugadores, pocos se acercaban por allí. SINATRA y los suyos (el Rat Pack) no enganchaban como en años precedentes. ELVIS elige esa ciudad para volver a los conciertos, con una concepción diferente: hotel de lujo (en este caso, el Hotel Internacional, recién construido), los asistentes cenando en sus mesas, y ¡¡¡más de 2000 personas!!!. BARBRA STREISAND inauguró este tipo de espectáculos en este recinto (del 2 al 30 de julio) y ELVIS fue el siguiente (del 31 de julio al 28 de agosto). Aparte de la estancia en el hotel y la cena (que eran una pasta), la asistencia al espectáculo suponía 15 dólares por persona, lo que hacía que, en cada sesión (había dos por noche), se recaudaran 30.000 dólares. Y el lleno se alcanzó en todos los conciertos de ambos. Los contrataron por cuatro semanas, actuando todos los días, dos sesiones. Cobraron 100.000 dólares por semana.

            La actuación de ELVIS aquella noche, y las sucesivas, fue sencillamente espectacular. Si alguien esperaba lo contrario, se equivocó de cabo a rabo: voz perfecta, atractivo físicamente y en perfecta forma, interactuando con el público (su talón de Aquiles tiempo atrás), dominio completo del escenario, canciones nuevas y antiguos éxitos adaptados al nuevo ritmo de los setenta..., todo un alarde triunfal para comenzar la segunda parte de su carrera musical, y lo mantuvo varios meses después como principal atracción de Las Vegas, revitalizando el turismo y los beneficios del lugar.

La película

            La Metro Goldwyn Mayer deseaba mostrar el día a día del cantante previo a su reaparición en los escenarios, después de ocho años fuera de ellos. Así nos muestra los ensayos con su banda (en lo que hoy llamaríamos jam sessions), la preparación de la banda coral (recordemos que en esos conciertos tenía el apoyo de la soprano MILLIE KIRKHAM y las voces femeninas de THE SWEET INSPIRATIONS y las masculinas de THE IMPERIALS), y más de la mitad del tercer concierto que dio en Las Vegas (aunque en el montaje se tomaron imágenes de hasta seis de aquellos conciertos; cada uno de una hora y quince minutos aproximadamente). También algunas imágenes sueltas de los momentos previos al concierto, desde la habitación del hotel al escenario, opiniones de algunas celebridades al entrar a la sala de actuación, y en los títulos de crédito finales, de la fiesta celebrada en la suite de ELVIS después del espectáculo del 10 de agosto de 1970 con SAMMY DAVIS JR., CARY GRANT, KENNY ROGERS y ROMAN POLANSKI, entre otros.

            Como sensación general, la película está muy bien planificada y montada, con una calidad de imagen y sonido realmente buenos. Está dirigida, evidentemente, a fans del cantante, pues para el público en general quizá resulte en algún momento reiterativa. Por encima de todo, sorprende la gran profesionalidad de ELVIS, repitiendo las cosas hasta que estuviera a su gusto, su minuciosidad en los detalles, y por encima de todo, su tremenda capacidad física para aguantar el ritmo que imprime a la actuación en directo. Y dos veces por tarde/noche. Es difícil no pensar en cómo en apenas seis años después, pudo perder esa envidiable forma física de la que hace gala. Probablemente el excesivo número de conciertos (según cifras oficiales dio 636 conciertos en Las Vegas; otras fuentes indican hasta 837), y la necesidad de suplementos vitamínicos y medicinas que le ayudaran a mantener ese nivel de exigencia. También sorprende ese acercamiento tan directo con el público, distribuyendo besos a diestro y siniestro, y no precisamente en la mejilla. Por tanto, respecto a la parte del directo, la más extensa (unas veinte canciones íntegras), el documental es sobresaliente. Sin embargo, la parte previa, la de los ensayos, resulta más artificiosa. Ciertamente ELVIS era un tipo amable, alegre, simpático, pero reitera, para mi gusto, algunas bromas. Es consciente de que están filmando un documental (lo dice un par de veces), y trata de ser el centro de atención permanentemente (gesticulando en exceso, comiéndose el micrófono varias veces, tirándose al suelo desde una silla, etc.). Los fans lo agradecen, pero al espectador ajeno puede llegar a cansarle.

              Una primera versión de la película se estrenó en los EE. UU. el 11 de noviembre de 1970.  A España, no llegará hasta el 24 de julio de 1972, en versión original subtitulada. En nuestra ciudad la estrena el TEATRO ZORRILLA el miércoles 6 de marzo de 1974 con las tres consabidas sesiones (a las 5, 7.45 y 10.45). Está en cartel tres días. Ese mismo año, el CINE MATALLANA la programa los días 1, 2 y 3 de noviembre, en una única sesión matinal a las 11:30 el viernes y el domingo, y a las 12:00 el sábado (el anuncio de El Norte de Castilla de la imagen corresponde a ese día, junto al del estreno en el Teatro Zorrilla). No he encontrado crónica de aquellas proyecciones, ni he localizado que se repusiera en otros cines posteriormente (aunque hubo algunos que hicieron ciclos musicales de películas pop/rock). Sería curioso conocer la opinión de algún espectador de aquellos años, pero me da la impresión que, sólo gracias a la perspectiva que da el tiempo pasado, es posible valorar en su justa medida lo que significó para el mundo de la música popular este gran artista.

 

 (Publicado el 26 - 10 - 2021)